martes, 3 de julio de 2018

La grieta y la postmodernidad

Recorre el idealismo y ve lo contrario que Marx: que la grieta es previa a la historicidad. No solo el sujeto está asaltado por una grieta (algo así como el pecado original), apunta Žižeck más bien que esa grieta es lo real. No es que el sujeto no sea capaz (“homo labilis” en expresión de Ricoeur) de reconocer lo real, sino que lo real es propiamente la incapacidad. Caos. La historia como liberación (materialismo histórico de Marx) es ideología: idealismo que desprecia el horror ni el caos. En Žižeck no cabe un Dios de bondad, belleza y verdad. Dios también es la grieta. Frente al nihilismo de la postmodernidad tolerante, el esloveno lee un realismo negativo: no es que la cultura o la historicidad apunten a la nada, sino que la nada es propiamente lo real que irrumpe por sorpresa en la historia y la cultura. Una irrupción que es violenta por que desenmascara los sueños materialistas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario