miércoles, 4 de julio de 2018

Encubierto

Acusado de que su victoria trae la anarquía, Bart Simpson hace suyo el eslogan: traeré la anarquía. Cree V. Leonore (El País, 1 abril 2011) que esta historia refleja el modo en que el filósofo esloveno Žižeck piensa: lo propiamente real es la grieta que irrumpe violentamente en la historia como crítica de los materialismos (marxista y capitalista). El capitalismo se protege en la tolerancia culturalista. La izquierda postmoderna, la de los movimientos, reduce la política a las reivindicaciones culturales (¿feminismo o ecologismo?) que se integran sin problema en el sistema. Así, la discusión sobre el carácter machista de una sentencia, ¿no esconde (ideologiza) el problema real: el valor que damos al derecho penal como solución de los conflictos? Las prácticas sostenibles, ¿no esconden la realidad de un sistema económico absolutamente depredador?

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