Y si
finalmente Godot no viene, dialogan Vladimir y Estragón (“Esperando a Godot”,
1952); Samuel Becket pone en boca de sus personajes: “al menos hemos esperado,
y eso no lo pueden decir todos” y refleja un nihilismo que aboca al absurdo. En
1956, Buero Vallejo estrena “Hoy es fiesta”: la esperanza de una comunidad de
personas pobres que conquistan la azotea del edificio a pesar de la vigilancia
de la casera. En realidad, la fiesta celebrada, la suerte de la lotería para
todo el vecindario, es falsa. La esperanza en que la fortuna cambie es
figura de la lucha por los derechos y la fraternidad. En la segunda escena de
la obra de Becket, el árbol quizás aparece con hojas. Como aquellas que A.
Machado canta del olmo hendido por el rayo:
“…unas hojas verdes le han salido”. Al poeta le hablan de vida y esperanza.
A Buero, de una tarea: conquistar la azotea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario