Filosofía es el paso del mito al logos. Lo situamos en los
filósofos presocráticos de Grecia. Sin embargo, como hace notar Nietzsche en
“El origen de la tragedia”, con la filosofía convive el oráculo de Delfos y los
ritos de Dionisos. El esfuerzo de la racionalidad tiene sus límites. En la
actualidad hablamos de inteligencias múltiples y poéticamente lo expresa Saint
Exupery: “El corazón tiene razones que la razón no entiende”. Aceptamos que
nuestros sentidos funcionan con reglas que dejan fuera una parte importantísima
de la realidad. Del mismo modo, los principios que rigen la lógica suponen
siempre un conocimiento tematizable y acotado en proposiciones o predicados.
Hay algo en los estados alterados de conciencia que no encaja. Sin embargo, el
irracionalismo, por incluir lo excluido puede dejar fuera también mucho,
muchísimo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario